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mercredi 6 avril 2011

El disputado voto del señor Cayo ¤ (Episodio « El Paulino »)

El disputado voto del señor Cayo ¤ Autor : Miguel Delibes ¤ Director película : Antonio Giménez Rico (Episodio « El Paulino »)

SEÑOR CAYO (Paco Rabal) Ande, qué buenas las hemos fumado aquí.
RAFAEL (Iñaki Miramón) ¿En las fiestas?
SEÑOR CAYO Oh, y en los domingos, y en el sorteo de los quintos, y a cada paso.
Tal que aquí, se sentaba el Paulino, el mismo al que Don Serén, el último párroco, le negó de primeras tierra sagrada por lo de la apuesta.
RAFAEL ¿ Qué historia es ésa ?
SEÑOR CAYO Las cosas. El Paulino se las daba de brujo.
RAFAEL Con que brujo ¡ Joder ! En este pueblo no se privaban de nada. SEÑOR CAYO Brujo, sí señor. Ya ve si lo sería que hasta acertó el día de su muerte, que lo adivinó, oiga.
El Paulino también echaba las cartas, ¿entiende? Aquí están. Y una tarde, estábamos tal que así, y va y dice: "Ya que estamos todos reunidos, hoy os voy a decir en qué año y qué día me voy a morir ".
El Bernardo le dijo: "Eso no puede ser, Paulino, eso, sólo Dios lo sabe". Paulino le contestó: "Pues yo también lo voy a saber".
Esto ocurría, si no me engaño, allá por el año 57.
Conque el Paulino puso una carta sobre la mesa: el seis de bastos.
"Mira, ya sabemos el día: un seis". Y ya ve, ante una cosa así, todos armamos corro alrededor de la mesa. Que me recuerdo que Don Serén le advirtió: "No juegues con esas cosas, Paulino , no tientes a Dios". Pero el Paulino estaba ciego, hostia, y volvió otra carta. "El cinco de oros". Contó con los dedos y dijo : "¡mayo!". Miró al corro y volvió a decir : un seis de mayo. Miró fijo para Don Serén y dijo: "ahora vamos a ver qué año". Que Don Serén le advirtió: "¡No sigas Paulino, no tientes a Dios!". Pero el Paulino cuando la cogía, la cogía modorra, oiga, que era muy testarrón el Paulino. Así que sacó otra carta : "y el seis de copas". Y antes de que Don Serén pudiera evitarlo, mostró otra: la sota de oros. "El 68", voceó. "Yo me voy a morir un 6 de mayo de 1968".
El Bernardo, que era muy llevacontrarias el hombre le dijo: "te juego un billete a que no". Y el Paulino : "¡Va!", que entonces tercié yo y le dije al Bernardo: "¿Y cómo le vas a pagar el billete si la dobla?"
El Bernardo se rascó la cabeza y dijo: "pago la caja, las copas y el funeral ¿vale?".
-"¡Hecho!" dijo el Paulino. Y en éstas, Don Serén se marchó de la cantina y le dijo al Paulino: "Los demonios te están inspirando ese juego. Yo no quiero ser testigo".
RAFAEL No me joda, señor Cayo, no me vaya a decir ahora que el Paulino murió ese día, se está quedando usted con nosotros.
SEÑOR CAYO ¡Chit, aguarde!
Tal día como el 5 de mayo de 1968, o sea la víspera, el Bernardo que se gastaba muy mala leche dijo a la hora de la partida: "mañana le toca morirse a ése, ¿os recordáis? ", que entonces todos : "es cierto". Y el Paulino que estaba ese día más bueno que Dios, nos miró uno por uno con unos ojos que echaban chispas, oiga. No vea qué ojos y dijo: " así es, mañana la doblo, y no te olvides de pagar la caja, las copas y el funeral ". Que lo dijo de tales formas, oiga, que todos nos quedamos mohínos, como acobardados.
Pero amaneció el día siguiente y el Paulino seguía tan terne, así que pensamos: "una broma". Echamos la partida como si tal cosa y al marchar dijo: "que lo paséis bien". Sólo eso dijo.
Pero a la mañana, cuando Don Serén salió a tocar misa, le encontró colgado de la galería de su casa, con el traje de fiesta y la gorra puesta.
RAFAEL ¡Ostras!
SEÑOR CAYO Era muy testarrón el Paulino, pero que muy testarrón. Ustedes no le han conocido.